jueves, 31 de enero de 2008

noticia antropologia

Un matemático calcula el récord definitivo de los 100 metros en 9.29

Asafa_Powell_100metrosEl matemático holandés John Einmahl, de la Universidad de Tilburgo, ha calculado el récord definitivo de 14 disciplinas atléticas y, entre ellas, el masculino de los 100 metros que él estima en 9.29 segundos apoyándose en la teoría de los valores extremos y en proyecciones estadísticas.

Einmahl no pretende predecir los récords posibles en un futuro lejano sino, como lo dice expresamente su estudio, los récords que podrían darse bajo las condiciones actuales. La base de los cálculos de Einmahl son las mejores marcas de 1.546 atletas masculinos y 1024 atletas femeninas de élite de cada disciplina estudiada que luego somete a complicadas elaboraciones matemáticas con ayuda de un ordenador.

Según los cálculos de Einmahl, el récord del maratón entre los hombres, que posee el keniano Paul Tergat (2h.04:55) es especialmente notable puesto que el matemático holandés considera que sólo podría ser mejorado en 49 segundos. Entre las mujeres, en cambio, el récord de la británica Paula Radcliffe, de 2h.15:25, podría ser claramente mejorado en 8 minutos y 50 segundos.

Curiosamente, también en las pruebas de velocidad, en las que habitualmente se cree que se está muy cerca del límite de lo humanamente posible, los cálculos de Einmahl apuntan a posibles mejoras. No sólo el récord de los 100 metros, que podría ser bajado de los 9.77 de Asafa Powell a 9.29, podría mejorar sino también el récord de 200 metros, en manos de Michael Johnson en 19.32, está casi un segundo por encima de lo posible.

En el lanzamiento de jabalina las mujeres parecen estar más cerca del ideal que los hombres. Mientras que el récord de la cubana Osleydis Menéndez, de 71 metros y 70 centímetros, podría mejorarse apenas en 80 centímetros, el del checo Jan Zelezny, de 98,48, podría mejorarse en 8 metros y 2 centímetros.

La teoría de los valores extremos, la especialidad de Einmahl, suele utilizarse para calcular cosas como "la mayor pérdida posible" en caso de catástrofes naturales, por lo que las compañías de seguros recurren con frecuencia a esta disciplina para determinar el monto de sus pólizas.

Einmahl también ha empleado esa disciplina para predecir el comportamiento de las acciones en los mercados bursátiles.

Descubren materia orgánica en un meteorito

Capsula StardustCientíficos del Centro Espacial Johnson de la NASA han encontrado materia orgánica en un meteorito que cayó en el lago Tagish de Canadá y que se formó en los extremos del sistema solar.

La principal ventaja de este meteorito respecto a otros hallados otras zonas del Planeta es que se ha mantenido impoluto en las aguas congeladas del lago desde su caída, hace 6 años.

La presencia de materia orgánica es especialmente importante en los meteoritos porque, según algunos científicos, es posible que anteceda al sistema solar y que haya sido el origen de la vida en la Tierra, reforzando así la teoría de panspermia.

En el meteorito han hallado glóbulos orgánicos huecos, esta no es la primera vez que se hallan en meteoritos, pero hasta la fecha los científicos discutían si se trataba de material proveniente del espacio o sólo era material terrestre contaminado.

No existía forma de determinarlo hasta que, en 2005, con ayuda de la nanotecnología, el Centro Espacial Johnson detectaron en los glóbulos orgánicos, que tenían una inusitada cantidad de isótopos de hidrógeno y nitrógeno, lo que demostraba que procedían del espacio exterior, formándose a una temperatura de 260 grados centígrados bajo cero.

El tipo de meteorito en el que se encontraron los glóbulos orgánicos es enormemente frágil y al chocar con la atmósfera posiblemente haya estallado, diseminando su contenido sobre una extensa área, de este modo, en otros muchos meteoritos que han caído sobre la Tierra, el Planeta podría haber quedado sembrado de estos glóbulos orgánicos al mismo tiempo que se formaba la vida.

Desvelada importante clave para entender el vuelo de los pájaros

Vuelo_pajarosLas fuerzas de gran alcance que se ejercen en los hombros de los pájaros donde convergen los músculos ha traído de cabeza a muchos biólogos. Los científicos se han preguntado miles de veces porqué los "empalmes" no se dislocan.

Mediante Tomografia Axial Computerizada (TAC), científicos de las Universidades Brown y Harvard han realizado un esqueleto virtual de paloma para después calcular todas las fuerzas implicadas. Ni la articulación del hombro ni los músculos podían mantener las alas estables.

La clave, aseguran, es el ligamento “acrocoracohumeral”, una pequeña tira de tejido fino que conecta el húmero con el empalme del hombro. El ligamento balancea todas las fuerzas convergentes, desde el tirón masivo del músculo del pectoral en el pecho del pájaro, hasta el empuje del viento debajo de sus alas.

“Nuestro trabajo también sugiere que cuando los primeros pájaros volaron, balanceaban sus hombros de forma diferente que en la actualidad. Algunos científicos piensan que en sus inicios aletearon desde el suelo” aseguró el director de la investigación David Baier.

Desvelada importante clave para entender el vuelo de los pájaros

Vuelo_pajarosLas fuerzas de gran alcance que se ejercen en los hombros de los pájaros donde convergen los músculos ha traído de cabeza a muchos biólogos. Los científicos se han preguntado miles de veces porqué los "empalmes" no se dislocan.

Mediante Tomografia Axial Computerizada (TAC), científicos de las Universidades Brown y Harvard han realizado un esqueleto virtual de paloma para después calcular todas las fuerzas implicadas. Ni la articulación del hombro ni los músculos podían mantener las alas estables.

La clave, aseguran, es el ligamento “acrocoracohumeral”, una pequeña tira de tejido fino que conecta el húmero con el empalme del hombro. El ligamento balancea todas las fuerzas convergentes, desde el tirón masivo del músculo del pectoral en el pecho del pájaro, hasta el empuje del viento debajo de sus alas.

“Nuestro trabajo también sugiere que cuando los primeros pájaros volaron, balanceaban sus hombros de forma diferente que en la actualidad. Algunos científicos piensan que en sus inicios aletearon desde el suelo” aseguró el director de la investigación David Baier.